Sobre mi
Isabel Sanz
A mí el sueño de Ávalon me atrapó hace años y desde entonces no me ha dejado.
Comencé mi vida profesional tratando de entenderme a mí y a los demás desde la mente lógica y siempre en una búsqueda de los “porqués”. Me licencié en Psicología clínica con este propósito, pero la vida me llevó más por el contacto directo y día a día con las personas como educadora social. Trabajé con diferentes colectivos, como personas con discapacidad y con trastorno mental. También con la infancia y con campesinas en el ámbito de la cooperación internacional en ONGs.
Todos estos trabajos me dieron, sobre todo, mucha amplitud de miras y un gran respeto por todo lo que somos y podemos llegar a ser. Y desde luego una expansión del corazón…
Con la llegada de mi hija mi vida dio un giro de 180 grados y mi mirada se volcó hacia nosotras, hacia nuestra nueva relación, en la que tanto he aprendido y continúo aprendiendo.
Ahí se han producido muchas sanaciones de heridas viejas y una infinidad de enseñanzas nuevas, cada vez más desde el sentir.
En los primeros años de crianza, en mi afán por aprender una nueva comunicación emocional con mi hija y conmigo misma realicé formaciones con profesionales excelentes, como la de “Maternidad feliz, Crianza respetada” con Mónica Serrano y “Mujeres Empoderadas” con Azucena Caballero y Mireia Long. Y desde ese lugar de apertura y transformación surgió la semilla de proyecto de este Espacio Ávalon.
Amplié mi visión descubriéndome de muchas maneras a través de la formación y práctica en diferentes terapias energéticas tales como la iniciación en Reiki, primeros niveles de Registros Akáshicos, con Katia Rashmi y la Bioreprogramación Energética (BREN) con Pepe Cabot.
Con el Reiki comencé hace diez años a practicar, donde realicé el primer nivel y hace un año he completado hasta el tercer nivel con la Federación Europea de Reiki Profesional. Con ellos he afianzado mi visión de lo que es el trabajo con esta energía sin símbolos, desde la transmisión de la energía del vacío que es energía pura, 100% Luz, neutra, que es la que forma parte de nuestro Ser y que conforma Todo lo que existe.
En la actualidad me dedico a gestionar este espacio, a ser terapeuta de Reiki, experimentar con la expresión corporal a través de la danza creativa y el movimiento auténtico, y a ser madre.